Es un clásico primer plato que nunca falla. Ya sea para calentar el cuerpo en una comida corriente de invierno, como entrante en una reunión familiar, o para preparar el terreno en una copiosa cena de Navidad, un rico caldo, una deliciosa sopa o un sabroso consomé siempre son bienvenidos. Pero, ¿son lo mismo? ¿se preparan igual?

Muchas personas se refieren al caldo utilizando indistintamente los términos sopa o consomé, y aunque son similares, tienen algunas diferencias que hay que conocer para llamar a cada uno por su nombre:

• Caldo: líquido resultado de la cocción de alimentos de origen animal y/o vegetales en agua.
• Consomé: resultado de la cocción prolongada de crustáceos, pescado, aves o carnes en un líquido. Es un caldo clarificado (desgrasado y colado) y más concentrado.
• Sopa: caldo al que se le agregan ingredientes sólidos (vegetales, legumbres, carnes, pescados, pastas, etc.).

A parte de estas diferencias, los tres son platos típicos del invierno, perfectos para cualquier día de frío. Se pueden preparar de muchas formas, añadiendo infinidad de ingredientes para darles un toque distintivo. En general, estos son los trucos con los que siempre vas a bordar las sopas, caldos o consomés:

• Utiliza agua mineral natural si quieres evitar gustos extraños. Se puede usar agua del grifo, siempre que tenga poca cal y poco sabor a cloro.
• No escatimes en la variedad de verduras, así ganará en profundidad y sabor.
• Utiliza varias carnes magras. Reduce en la medida de lo posible tocino y manteca. Dos buenas opciones son el pollo, para lograr un irresistible consomé de ave; o el morcillo de vaca, con el que coronar de sabor un consomé de carne.
• Los mejores caldos de pescado se hacen con peces de roca. Un buen rape será el rey del consomé de pescado.
• No olvides incluir huesos o espinas para potenciar el sabor.
• Durante la cocción, retira las impurezas y la grasa de la superficie con una espumadera, así obtendrás un caldo más fino.

¿Tienes algún truco o receta de caldo, sopa o consomé con los que triunfas?