Accede a tu cuenta

  • Conectando...
BM SUPERMERCADOS

ACTUALIDAD

Alimentación saludable

Té: la bebida ideal para tomar a cualquier hora del día

El té es la bebida más popular del mundo después del agua. Prepararlo es tan sencillo como añadir agua muy caliente sobre unas hojas de la planta Camellia sinensis y dejarlo infusionar durante unos minutos.

Los primeros registros del té están en China. En el siglo III d.C, lo utilizaban como bebida medicinal y fue a principios del siglo XIX, cuando Gran Bretaña popularizó el “afternoon tea”, una pausa en la jornada para disfrutar de esta bebida junto con algo de comer.

Numerosos estudios atribuyen al té propiedades beneficiosas para la salud por la gran cantidad de antioxidantes que contiene. Ayuda a prevenir diversas enfermedades como el cáncer y la diabetes, entre otras. Otros estudios en cambio, asocian el consumo de té a la quema de grasa corporal y, por tanto, a la pérdida de peso.

Todos los tés proceden de la planta Camellia sinensis. En función del tipo de hoja, el nivel de oxidación y procesamiento de estas, el té se clasifica en cinco grandes grupos:

- Té negro: el más consumido. Se elabora con las hojas de C.sinensis, que se secan y fermentan, aportando un color más oscuro y un sabor más intenso. Contiene cafeína -o teína- además de L-teanina, una sustancia que puede unirse a la cafeína potenciando su efecto y aumentando el rendimiento intelectual. También combate la inflamación y favorece un buen funcionamiento inmunitario.

- Té verde: té no oxidado. Las hojas de C.sinensis se calientan tras su recolección para detener la oxidación, preservando así un alto nivel de antioxidantes. Al igual que el té negro, contiene cafeína y L-teanina.

- Té Oolong:  té semioxidado. Las hojas reposan unas horas antes de detenerse la oxidación. El grado de oxidación hará que se parezca más al té negro o al verde, tanto en color, sabor y propiedades de ambos. Contiene antioxidantes, cafeína, L-teanina y algunos minerales.

- Té blanco: el menos procesado. Se utilizan solo los brotes y las hojas jóvenes que se dejan secar. La infusión de estas hojas produce una bebida de color claro y sabor suave. Es rico en antioxidantes y contiene menos cafeína que el resto de tés.

- Té Pu-erh: fermentado -no oxidado-. En el proceso de elaboración participan microorganismos vivos y no solo el oxígeno. Además de los beneficios del té, aporta los beneficios de los fermentados, esto es, alimenta la microbiota intestinal, mejorando la digestión, la inmunidad y la salud en general.

¿Cuál de todos es tu favorito?

 

  Rocío Narbaiza: Farmacéutica & Nutricionista