
De temporada
Productos de temporada en verano
No nos cansamos de repetirlo: lo mejor es consumir productos de temporada. Lo agradecerá tu bolsillo porque los productos en temporada están a mejor precio, lo agradecerá tu paladar porque son los que están en su momento óptimo de consumo y lo agradecerá tu salud porque los productos de temporada conservan mejor sus propiedades.
Ahora que el verano ha comenzado trae consigo una de las estaciones más rica en frutas y verduras, aunque también el mar tiene mucho que ofrecer. Así que toma buena nota de lo que tienes que incluir en la cesta de la compra durante estos meses estivales.
De la tierra
- Frutas con hueso: Los albaricoques, los melocotones, las nectarinas, los paraguayos, las ciruelas… todas estas frutas tienen algo más en común que el simple hueso que llevan en su interior: son las estrellas del verano. En general, todas ellas se conservan mejor fuera de la nevera, pero debido a las altas temperaturas propias de estos meses, si ya están en un estado de maduración muy avanzado, es recomendable guardarlas en el frigorífico.
- Cerezas: parece mentira que una fruta de dimensiones tan minúsculas pueda tener tantísimas propiedades. Las cerezas reducen las posibilidades de padecer algunas enfermedades cardíacas; son ideales para las personas con insomnio porque contienen melatonina, lo que significa que ayudan a regular los ciclos del sueño; previenen la pérdida de memoria; son un anti-inflamatorio natural perfecto para las dolencias musculares; y un largo etcétera, además de ser bajas en calorías y ricas en antioxidantes. Date prisa en consumirlas porque son propias del inicio del verano y pronto dejaremos de encontrarlas en su momento óptimo de consumo.
- Melón y sandía: Son las frutas con más cantidad de agua (cerca del 90% de su peso) y eso hace que sean las preferidas por muchos en los meses de calor. Son las que más nos refrescan.
- Berenjena y calabacín: Tanto la berenjena como el calabacín comienzan en el mes de mayo y ambas verduras podemos encontrarlas hasta septiembre u octubre. Por eso es ahora, en verano, el mejor momento para consumirlas. Destacan por su alto contenido en ácido fólico.
Del mar
- Bonito: La temporada del bonito comprende los meses de verano, y puede llegar hasta octubre. Su grasa es rica en ácidos grasos omega-3 que ayudan a disminuir los niveles de colesterol.
- Cabracho: Se trata de un pescado blanco semigraso que estamos acostumbrados a verlo preparado en el típico pastel de cabracho. Sin embargo, hay muchas otras formas de cocinarlo. Al horno, a la plancha, en salsa, guisado o incluso en sopa.
- Sardina: Es uno de los pescados más propios del verano, de hecho, no hay Noche de San Juan que se conciba sin una sardinada. La noche más corta del año marca el inicio de la temporada de la sardina.