
Alimentación saludable
5 alimentos que favorecen la digestión
La digestión es el proceso que realiza nuestro cuerpo para absorber los nutrientes y trasladarlos al torrente sanguíneo que alimentan las células de nuestro cuerpo.
En base a los alimentos que consumamos, y cómo lo hagamos, este proceso se ralentiza o se acelera, causando a veces desajustes que pueden causarnos molestias: gases, irritación o acidez son los síntomas más comunes que, si no se resuelven, pueden derivar a posibles problemas de salud como la gastritis o las úlceras.
Para evitarlo debemos cuidar nuestra alimentación en la mayor medida posible. Los alimentos bajos en grasas, prebióticos y ricos en proteínas son idóneos para ello.
Aquí va una lista de 5 alimentos y bebidas digestivas para cuidar tu estómago:
- Carnes bajas en grasa: pollo, pavo, pescado y preferiblemente cocinados a la plancha, al vapor o cocidos. Evita frituras que resultan demasiado pesadas.
- Bebidas vegetales: encontrar este tipo de bebidas en el supermercado ahora es más fácil que nunca. Arroz, avena, almendras… La variedad es infinita y todas ellas se presentan como alternativas muy suaves y ricas en vitaminas para el estómago.
- Arroz blanco: si comías en el comedor del colegio y te dolía el estómago, es probable que tu menú del día fuese un plato de arroz blanco y una manzanilla. No es casualidad. El arroz blanco hervido y con poca sal es una alternativa idónea.
- Yogur: gracias a su contenido en prebióticos (microorganismos vivos presentes en bacterias o levaduras) los yogures son un alimento ideal para fortalecer el sistema inmune y la flora intestinal.
- Infusiones: no hay nada mejor que una buena infusión si nuestro estómago nos da guerra. La hierba luisa, el boldo, aquellas que contengan jengibre y, por supuesto, la manzanilla son favorables para un buen tránsito intestinal. Aquí tuenes cómo preparar la infusión perfecta.
Más allá de la alimentación, también es aconsejable tener en cuenta aquellos hábitos que nos puedan estar perjudicando a largo plazo. No importa solamente qué comemos, sino cómo comemos: los excesos de comida sumados a las prisas pueden perjudicar nuestro estómago en mayor medida de lo que creemos.
Por tanto, es imprescindible mantener una rutina de alimentación diaria constante, sin grandes alteraciones en nuestros horarios para no afectar a nuestro ritmo biológico. El cuerpo es sabio, ¡escucha sus señales!